La traición de Tulio Capriles Mendoza

El ¿qué motivo a Tulio Capriles a hacer lo que hizo? ha sido la pregunta de las 50 mil lochas entre l@s urrac@s. Cada una da una versión de los hechos, y hacen el intento de determinar qué fue lo que llevó a Tulio Capriles –apoyado por su madre- a tomar por la fuerza el siglo, cuando, ya lo dijimos, para ambos el diario no era algo que les generaba el más mínimo interés.

Los antecedentes de esta toma se remontan a los días de Mireya Zurita (Ada Mireya Izquiero de Zurita), nombre de ingrato recuerdo para muchos en el siglo, debido a la conducta déspota contra los trabajadores que ejercía desde la dirección del diario, cargo que ocupó durante 5 años. Fue “impuesta” por Tulio Capriles Hernández, y luego de su muerte siguió en el cargo. “Gobernó” sola el diario cierto tiempo, y luego –a petición de Tulio C.H- con Manuel a cargo. En ese momento ya se comenzaron a producir las primeras diferencias y roces entre ambos, que terminan con varios “despidos” no acatados.

Dicen que Manuel muchas veces prefería irse por un tiempo y dejarla a cargo para evitar problemas, pero cuando ya la situación se hizo insostenible, y con todos los periodistas apoyando su salida, una vez más tomó la decisión de sacarla del diario, ahora sí de forma definitiva. Luego de ella vendría Yoviris Daviot, otro personaje de mal recordar, por todos los abusos que cometía desde el cargo de Jefa de Personal. Al concretarse estos cambios, se pensó que comenzarían las transformaciones para una nueva etapa de el siglo…¡Nada más lejos de la realidad!

Cuentan las malas lenguas que ambas al verse sin poder alguno corrieron donde Tulio Capriles Mendoza y su madre –con quien aparentemente las unía cierta amistad- en busca de apoyo. El 21 de Enero ocurre un hecho sorpresivo: aparecen Tulio Capriles Mendoza y su madre en el diario –cosa que ya de por sí era sorpresiva- para anunciar que vuelven las despedidas y que ahora él –y no su tío- tenía el poder dentro del diario y tomaba las decisiones. De un tacón y sin tapita dando vueltas quedaron todos los trabajadores, pero lejos de dormirse en los laureles, se reunieron en Asamblea, y firmes pararon la empresa para expresar su rechazo a la medida, haciendo incluso que la edición del día siguiente constara sólo de 2 cuerpos y no de los 4 originales. Cedió y prometió que no regresaban.

El cielo encapotado anunciaba tempestad, y previsivos los trabajadores cocinaban la idea de unirse en un sindicato, que al parecer nunca fue política de los Capriles y sus empresas, pero que en vista de la situación contó con el apoyo y visto bueno de Manuel Capriles. Corrían ya por los pasillos del diario rumores de una alianza Didalco-Tulio Capriles M, pero eran sólo eso, rumores.

El 22 de Enero fue otro día, y hubo otro conflicto. Se acercó Manuel Capriles a la redacción del periódico a recoger todas sus cosas y Tulio Capriles Mendoza se armaba con 15 guardaespaldas para no dejarlo pasar. Advertido de esto, Manuel llega al estacionamiento y lanza un tiro al aire. Los guardaespaldas del sobrino no oponen resistencia y lo dejan pasar. Allí dentro lo esperaba Tulio Capriles con Guillermo Luces para desalojarlo. Sí, para desalojar a su tío. Se armó una revuelta en el siglo y todos los trabajadores corrieron al piso 2 a evitar la salida de Manuel Capriles. “Tú no te vas”, “No nos dejes solos”, “Hazlo por nosotros”, entre otras, eran las consignas que se escuchaban. Aquello fue una "sampablera" de marca mayor donde hubo empujones, gritos, insultos, revólveres y un herido.

Estaba acompañando a Tulio Capriles Mendoza el abogado Guillermo Luces ligado a Primero Justicia y escritor dominical de el siglo –por concesión de la Zurita- que sin ton ni son y con una ira desmedida se le fue encima a Manuel Capriles. Los guardaespaldas de Tulio Capriles Mendoza los separan, pero al rato el abogado se les suelta, viniéndosele nuevamente encima a Manuel Capriles, pero golpeando a su chofer, lesionándole un brazo.

Cuenta una urraca que volaba sobre el edificio azul y estaba escondidita en una de las ventanas escuchando todo, que Tulio Capriles Mendoza le dijo a su tío antes de irse: “Vio Tío, ahora no va a usar este periódico para sus problemas y rencillas con Didalco”. El mismo Didalco que le quitó los Toros de Aragüa de el Coliseo el Limón, y más grave aún: el mismo Didalco que se la juró a su padre, y por el cual tuvo que exiliarse al extranjero. Después de escuchar eso, y en perfecto latín: Consumatum est.

Así fueron los hechos, y hasta aquí todo parece cuadrar perfectamente, pero hay una pregunta que no dejo de hacerme y a la cual aún no le consigo respuesta. ¿Qué necesidad tenía Tulio Capriles Mendoza de meterse en todo ese paquete con un diario al que jamás le ha parado y que es la empresa que menos ganancia genera de todas? ¿No les parece sospechoso? Es que por más amistad que las botadas tuvieran con Mary Mendoza Viuda de Capriles, no era como para arriesgarse a tanto. En pocas palabras: ese cuentito de que Tulio Capriles Mendoza quería revolucionar el periodismo con el siglo y por eso lo tomó yo no me lo creo.

¿Qué hay detrás de todo eso? Existe una versión “culebrera” según la cual todo es parte de una venganza contra del difunto Tulio Capriles Hernández, de parte de su viuda, que ahora usa al hijo para acabar con el diario que su esposo tanto quería, movida por todo el rencor acumulado desde que la cambiaron por Fiorella Di Cera. Esa no suena ni tan lógica ni tan creíble, porque si a ver vamos toda esta situación ha afectado para mal la “buena” imagen ante la hight de la Dra. Mendoza Viuda de Capriles. Es que eso de tribunales, sindicatos, peleas con periodistas, tomas de media noche, policías y escándalos…"o sea jelou" eso no va con la hight, y por más rencor ¿arriesgarse a eso? No creo.

¿Y la versión de una componenda Didalco-Tulio Capriles? Esa, luego de los acontecimientos es la que cobra más fuerza, ya que la policía de Didalco fue la que colaboró con ellos, sacaron del juego a Manuel Capriles y el siglo ya no le hace oposición a Didalco ni a Poli-Aragüa. Allí todo se ve clarito, pero ¿a cambio de qué? ¿Qué tenía Didalco que ofrecerle a Tulio Capriles M. para eso? ¿O acaso se vio Tulio Capriles obligado a…?

La verdad todo aquí se complica. Afirman los entendidos que Tulio Capriles M. ha encontrado para su venta de carros un muy buen cliente en Poli-Aragüa…¿Vendió el siglo por unos carros? Lo dudo. Existe una versión según la cual Mireya Zurita se ha vuelto la asesora de Tulio Capriles M. Sobre su cabeza pende una espada de Damocles, por la apelación –en un tribunal de Aragüa, ¿acaso controlado por Didalco?- a una sentencia que la condenó a 18 meses de prisión, por no querer revelar sus fuentes. ¿Vendió el siglo por una sentencia para una amiga y unos carros? Tampoco me cuadra.

Algo muy poderoso, y quizás muy oscuro debe haber detrás de todo esto. Quizás tan oscuro que nadie lo ve, y esperemos que algún día la luz de la verdad lo ilumine. Lo cierto es que quedan aún muchos cabos sueltos sobre los motivos del “heredero” para hacer lo que hizo, pero de lo que no cabe duda es que lo que hizo Tulio Capriles Mendoza no puede recibir otro nombre que no sea TRAICIÓN.

PDTA: En un ejercicio de absoluta irresponsabilidad de mi parte, publiqué esto sin confirmar las fechas, sobretodo con los sucesos del 21 y 22 de Enero. Quizás algo de lo que pasó el 21 aparece fechado como el 22 y viceversa. De todos modos esto no es tan grave, ya que pueden tener la certeza que todo lo que allí narro pasó entre esos dos días. Aún así espero la confirmación para arreglarlo, y uds están en la potestad de corregirme.

EL PRÓXIMO LUNES: Comienza el horror en el siglo