Querida Chepa Candela...a propósito de lo que me escribiste

NOTA: Mientras escribía esta carta se produjo una especie de dicotomía, y no me pregunten como encontré la manera de separar a Chepa Candela, de su actual redactor, razón por la cual hice dos cartas: esta primera para la Chepa, y la de mañana para quien la escribe.

Me he enterado gracias a la gente de TVVI –esa que a veces visitas buscando información- que me has dedicado a mí y a mis niñ@s de Cotilleo Mundano unas cuantas líneas en tu columna diaria de 2001. La he leído con todo el detenimiento y seriedad que un texto escrito por ti amerita, y me he permitido traerlo al blog para mostrárselo a mis lectores, y ser más precisa en esta especie de carta-respuesta que te escribo.


“Yyy arrancando esta nueva “week” ¡All Irones includes! (Entiéndase: ¡Con todos los hierros! para los que no “parlan” inglés... ¡jeeejeeem, jeeejeeem!, me atacó la carraspera), aquí me tienen como de costumbre ¡teclea que teclea! procesando todo lo bueno, la malo y lo feo del acontecer farandulero de este país... y el resto del globo terráqueo, donde durante más de tres décadas (Se dice fácil) he sido considerada la “nomber uan” del chismorreo farandulero ¡duélale a quien le duela!... sobre todo aquellas que dicen tener la “luz clarita”... y los que ahora se llenan su asquerosa “jeta” (¡Alábate pato, que mañana te mato!) afirmando, a través de su jipata voz, que en este “cotilleo mundano” no tienen competencia, cuando no son más que una cuerdita de advenedizos mediocres, (¿De qué pantano saldrían?) que “mordiendo” su propia carne envenenada, no pueden ocultar su envidia y resentimiento... Mientras esta fablistana sigue aquí ¡campante!... y vibrando ¡más que nunca!... porque a esta “Josephine Fire”... ¡Nadie le quita lo bailao!...”

Según entiendo por lo que leo, nos dedicaste el introito de la columna, que está bastante largo por cierto, lo que me hace sospechar que ante la carencia de información no te quedó otra opción que terminar de llenar los aproximadamente 5.500 caracteres que te exigen en el periódico, escribiendo eso sobre nosotr@s. Pero ni modo, supongo que ha de ser un honor que la Chepa Candela me tenga en cuenta así sea para cuando se queda sin palabras, ¿verdad que sí?

Mira Chepa te voy a ser sincera. Comenzaste a venirte a menos desde el año 2001 cuando Atamaica Nazoa abandonó el barco y te dejó a la deriva. Eras una temenda nave, un Titanic, pero sin nadie competente a bordo. Tus riendas las tomó William Guzmán –el peor de todos los capitanes que te podían tocar- y te hizo estrellar contra un iceberg, no de hielo sino de mediocridad, y a punta de malas informaciones, pésima ortografía, inventos rocambolescos, ollas mal montadas, sospechosas complacencias, e intereses económicos –y sexuales-, se le puso fin tus décadas de oro y terminaste siendo esta cosa penosa que eres ahora.

Pobre de ti Chepa, ¿quién diría en los albores de los años 80 que caerías tan bajo como ahora? ¿Quién diría en aquella época cuando anunciarte en la portada de Ronda era sinónimo de vender más ejemplares, que pasarías por tan mal momento? Es la mejor muestra de lo dañinas que son las manos de ese oscuro e inescrupuloso personaje que mientan William Guzmán del que después me encargaré. Es más Josefina Candela, ¡cosas de la vida!, tú que eras homofóbica y le hacías la vida cuadritos a los gays de la farándula revelando sus secretos, terminaste siendo la carnada más efectiva de Willi para pescar compañeros de cama en el mar de los modelos y gimnasios. Vejada y usada…¡qué dolor!

Ahora te jactas que estás más fuerte que nunca y que tu final está lejos. Es cierto, en físico sigues existiendo, y te auguro muchos años más a full color en la página de farándula de 2001 -¿recuerdas cuando ibas en la última del cuerpo 1, mezclada con otras informaciones porque dicha página no existía ya que contigo bastaba y sobraba?- pero siendo lo de ahora: una columna sin alma, sin credibilidad, que anda por el mundo lanzando datos que la gente lee cada vez con más suspicacia y se pregunta dos veces si serán verdad. Aburrida como tu sola, porque hasta esa chispa que tenías otrora, cuando leerte significaba morirse de la risa con tus folklorismos –sorry RAE-, chistes y maldades, te la robaron. Siendo objeto de burla por las inverosímiles y a veces increíbles metidas de pata que cometes ya con mucha frecuencia -¿has visto la cantidad de post que abren en los foros burlándose de estos “chepazos”?-. En pocas palabras Josephine, dando pena, sin duda el más triste de los finales que podía tener aquella que vivió e hizo con su lengua, pasar pena a los demás.

¡Larga vida a la reina!...pero vaya vida.

MAÑANA NO SE PIERDA LA OTRA CARTA