REPORTAJE ESPECIAL: Concierto Paz sin Fronteras

Y el milagro sucedió ayer. Los militares que tomaron la frontera de acuerdo a las ordenes belicistas de Hugo Chávez, fueron sustituidos por un mar de gente que junto a seis grandes de la canción, gritaron al unísono que no es la guerra sino la paz lo que se busca. Fue un grandioso, digno y memorable espectáculo, que pasará a los anales de la historia como la muestra inequívoca que la música y los artistas no solo están para entretener y divertir a la gente, sino que con un poco de voluntad y la disposición para involucrarse de lleno en los problemas que afectan al pueblo, se pueden lograr grandes cosas. Fue un bofetón en la cara para todos aquellos que buscan la guerra, así como para quienes afirman que los artistas deben estar en una burbuja de cristal que les impida estar en contacto con la realidad, porque ellos sólo están “para entretener”.

Me complace sobremanera que a ese muchacho de oro llamado Juanes le haya salido todo tan bien y el concierto que con tanto esfuerzo organizó haya sido todo un éxito. Es que se cuenta y no se cree, porque para quienes sabemos como se bate el cobre en estos negocios, eso de preparar en casi una semana un concierto, con estrellas de la talla de quienes asistieron, es sin duda una proeza que solo la labor titánica de alguien con tan buena voluntad como Juanes era capaz de lograr.

El concierto lo vi obviamente por la señal de RCTV Internacional, quienes gracias al cielo han encontrado en Caracol TV de Colombia el apoyo y la colaboración que los canales venezolanos como Venevisión –que, oportunistas al fin, pasaron el concierto- y Televen le han negado. Como los guerreros que son, con uñas y dientes trabajaron para llevar una excelente cobertura que comenzó mucho antes con los reportes que desde el Táchira hacía esa gran reportera que es Yamileth Jímenez, y los comentarios desde el estudio de El Observador de la siempre dulce Maria Elisa Gonzáles. También la cada vez más apreciada por quien esto escribe, Camila Canabal, hizo algún contacto con estudio y fue ponchada varias veces por la cámara de Caracol, entrevistando con el micrófono de RCTV a todo el mundo; así como cantando y bailando, de punta en blanco como ella sola.

Gracias al cielo los amigos del presidente Chávez, es decir, los matones de las FARC, aunque imagino que ganas no les faltaron, no se aparecieron ni sembraron su mortandad en tan noble espectáculo. Tampoco los paramilitares; y mucho menos las FBL o Lina y sus campesinos guerreros. Todos aquellos que han sembrado la violencia, la guerra y el terror se mantuvieron aparte dando paso a esta gran explosión de paz y hermandad de la cual me siento muy orgullosa de poder escribir. El que sí hizo de las suyas fue el sol, produciendo más de 2000 desmayados, al punto que los bomberos se vieron en la obligación de abrir sus mangueras y emapapar a los asistentes.

La entrada de los cantantes juntos, sin duda fue el momento más emocionante de todo. La ovación que recibieron, muestra inequívoca del cariño y agradecimiento del público, erizaba la piel, y de hecho podría jurar que el propio Juanes soltó alguna lagrimita en ese momento. Fue algo espectacular, una energía que salía de la pantalla y se instalaba en nuestra habitación para hacernos partícipes de tan sublime momento.

Después cantó cada uno por su lado, y por supuesto bien desmenuzadita tenemos cada actuación:

CÁRLOS VIVES: ¿Qué se puede decir de él? El más alegre de todo el concierto, parecía un muchachito emocionado, derrochando carisma y simpatía. Siempre he dicho que si hay alguien a quién yo me llevaría a una fiesta ese sería a Carlitos, porque es una persona tan alegre, contenta, movida, extrovertida, que con él se la debe pasar genial. Su música es de esa que pone a bailar a la gente de una, y en este concierto no fue la excepción con "La Tierra del Olvido", "Pa Mayté", "Déjame entrar". Francito Monroy que hizo un trabajo excelente bloqueando en vivo y directo desde el lugar de los hechos, definió su actuación con una frase muy pertinente: encendió al público. ¿Se podía esperar menos de él? Por supuesto que no, aunque muchos quedamos esperando que cantara “La Gota Fría”, su tema emblema.


JUAN FERNANDO VELAZCO: ¿Y quien es ese? Eso fue lo que pensamos cuando escuchamos su nombre ya que por estos predios el joven no es muy conocido, sin embargo sus canciones fueron coreadas por el público, y haciéndole justicia hemos de decir que no canta nada mal, todo lo contrario, para el estilo que tiene lo hace muy bien. Aunque considero que fue un error ponerlo después de Vives, porque se produjo un contraste muy grande entre esos alegres vallenatos, y las lentas -pero buenas, ¡ojo!- baladas del ecuatoriano, cuya foto solo del concierto no pude conseguir para colgar acá. Como dato curioso cuando cantó a dúo con Juanes, el colombiano leía la letra desde su Blackberry Curve.


ALEJANDRO SANZ: ¡Ay Alejandrito, a pesar de esa sonrisa tan pícara que tienes y la chivita blanca me toca criticarte! La verdad es que el repertorio inicial me pareció desatinado, ya que eran temas muy nuevos que la gente no conocía, y medio complicaditos de entender. Después el nene agarró el buen camino al cantar “No es lo mismo” que incluso fue coreado por el publico, para terminar cantando el popular “Corazón Partío” junto a todos los demás. Del canto grupal vale acotar que Vives estaba medio perdido en la canción, al pobre de Montaner lo dejaron sin micrófono, y Miguel Bosé se metió una de baile flamenco que pa que les cuento. Por supuesto en este show no pudo faltar el pobre enfermo de Juan Salas, esa vergüenza para todos los venezolanos, a quien deberían internar en un cárcel o en un psiquiátrico para que se deje de tanta estupidez. Dicen que Osmel le dio unos correazos en el Miss Venezuela, créanme que lo entiendo, porque de haber estado yo en ese concierto, ¡ay papá!.

JUAN LUIS GUERRA: Gracias a Dios cantó sus clásicos de siempre, entre esos las burbujas de amor con las que ha enamorado a tantas y tantas personas. Divirtió con sus merengues "La Bilirrubina" y "Las Avispas", y definitivamente, no podía ser de otra forma, gustó. Menos mal no cantó “La llave de mi corazón”, esa que para mi juicio es una mala canción con la que inexplicablemente se llevó un Grammy. Artistazo este, que sentado en una silla con una guitarra poner a bailar a todos. Cantó en grupo “Ojalá que llueva café” y Montaner llegó tarde y se quedó, nuevamente, sin micrófono. Era, por muchas cabezas, el más alto de todos, y el único que no fue de pantalón blanco, lo que aunado a la barbita y la gorrita, según mi estimado Fran lo hacía ver como un chichero jajaja.

MIGUEL BOSÉ: El españolote fue el que más se gozó el concierto. Bailó como le dio la gana y cantó también cuando le dio la gana aunque no le tocara. En su turno al bate interpretó varias canciones lentas pero con letras espectáculares como "Te Amaré", así como el clásico de clásicos con el que alguna vez nos hiciera suspirar imaginándolo como el perfecto “Amanate Bandido”. Tuvo su duo con Juanes, esta vez sin chuleta digital, con el gran tema "Nada Particular". Eso sí, el paso de los años le ha hecho crecer la barriguita, pero no le ha quitado todo ese carisma y desenfado, que, a pesar de todo, conserva intacto.
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RICARDO MONTANER: ¡Oh por Dios! Creo que fue el más coreado de todos. ¡Impresionante! La emoción se podía sentir detrás de las cámaras, y el inmenso coro que lo acompañó durante todas las canciones erizaba la piel. Cantó esos clásicos de toda la vida como “La cima del Cielo”, “Tan enamorados”, "Bésame". etc, y volteó hasta el lado de atrás a cantarle a quienes estaban allá. En Caracol dijeron: Jugó de local, y así parecía por la respuesta de la gente. Se la comió nuestro representante en el concierto, a quien también vi bastante gordo por cierto.

JUANES: ¡Papito! Eso le gritaron en la rueda de prensa y no era para menos. El único con una figura que le permitía tener la camisa bien ajustadita y por dentro jajaja. Muy bello este colombiano de gran corazón. Mezcló alguno de sus clásicos –"A Dios le pido", "La camisa negra"- con las canciones de ahora –"Me enamora"-, y lo mejor es que todas eran conocidas…¡hasta por mí! Así cantó de bien que el mismo Bosé no aguantó las ganas de volver a compartir tarima con él y se subió de nuevo a tararear -míren que no se la sabía del todo bien- "Me Enamora". Su actuación, a pesar de la tremenda grosería que soltó en pantalla, estuvo impecable, y a fin de cuentas a Juanes todo se le perdona.


LAS PORTADAS
Cómo es de suponerse un hecho histórico como este ocupó inmenso centimetraje en las portadas de los diarios colombianos y venezolanos que en su mayoría –salvo excepciones como la de Últimas Noticias- abrieron con la noticia. Acá los mejores titulares de la jornada:

LA CASTA FAMILIAR
Aunque yo no lo hice sino un día después, mi familia bloguera sacó la casta y son sendos trabajos en vivo y directo reseñaron todos los detalles del concierto. A saber:

*El sobrino treintañero e irresponsable, muy a su estilo y a pesar de Intercable, contó detalle a detalle lo que vio. (aquí)
*Las ahijaditas de Cotilleo-Mundano tuvieron antesala y todo. A ellas no se les escapó absolutamente nada, y tienen el mejor compendio de la web con información del concierto. (aquí)
*El ¿compadre? Francito Monroy agarró sus cachachás y se fue al lugar de los hechos, reportando en vivo gracias a su Iphone...¡oh, sí! La tecnología nos permitió enterarnos de todo lo que vio el amigo desde allá. ¡Excelente! (aquí)

¡¡¡FELICITACIONES A TODOS!!!