¡Ay Dios!: Rafael Poleo de la CIA y Luis Ferández GAY

Sucede con frecuencia que alrededor de los personajes públicos se especula y se dicen cosas que no son del todo ciertas. Son rumores que poco a poco cogen fuerza y llegan a las páginas de los periódicos y revistas a través de las columnas de chisme –y de las serias también-. Cuando esto pasa las reacciones de los afectados diversas: desde vetar a la prensa como hiciera Maite Delgado, hasta darle más material como suele hacer Lila Morillo, pasando por ignorar los comentarios y hacer mutis.

Sin embargo a veces -pocas la verdad- se da la situación de que la “victima” lejos de hacer algo de lo anteriormente descrito, juega con el chisme y le saca el mayor provecho posible. En este caso los afectados han de ser personas lo suficientemente, no digamos inteligentes para no ofender a los otros, digamos astutas, como para saber darle la vuelta y manejarlo sin que el chisme termine por devorarlos. Son los casos en los que ya la cosa deja de ser un chisme o rumor para convertirse en un “mito nacional” que pasa de generación en generación y siempre deja la duda de si será verdad o mentira.

Este es el caso de Rafael Poleo, a quien por años se le ha acusado de ser agente de la CIA. Creo que la primera vez que la información circuló fue a través de aquella revista que tuvo Domingo Alberto Rangel (quien por cierto es una persona que respeto mucho y leo todos los domingos en 2001) llamada La 15NA, y a partir de allí con cierta frecuencia ponen a rodar la bola diversos personajes como Mario Silva o Juan Barreto. Revisando en mi archivo me he encontrado con un viejo ejemplar de Zeta donde hay un Péndulo en cuyas líneas Poleo da una brillante respuesta a ese cuento:
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“El agente de inteligencia de una potencia extranjera tiene un sitio de honor en la mitología occidental. Lo prueba el éxito y prestigio de James Bond. ¿Por qué, entonces, destruir un mito que nos favorece?”

“a la izquierda cretina sí que le debo mucho. Entre otros gajes, uno cuya importancia solamente yo puedo medir, porque es algo, si no secreto, por lo menos bien íntimo. Hablo de la cosa esa, incómoda a la par que productiva , de que soy de la CIA. No creo que en Venezuela haya un ciudadano común que no se crea eso que ya es parte de mi personal mitología. Yo mismo pongo escaso empeño en rebatirlo. Desde que la izquierda cretina empezó a decirlo...algo en mi computadora subconsciente me aconsejó dejarlo que corriera.”

“A la fabulación de Fleming hemos de estar agradecidos todos los agentes extranjeros reales o presuntos, pues las capacidades amatorias atribuidas a Bond se han extendido, tan caprichosa como eficazmente, a todos los sospechosos de pertenecer a lo que genéricamente se ha llamado la CIA”.

Pero la cosa trasciende los muros de la política y llega a la farándula como sucede con Luis Fernández. El esposo de Mimí Lazo ha sido victima desde sus inicios de maledicentes comentarios sobre su sexualidad según los cuales sería bisexual o gay. En respuesta a ese “mito nacional” que lleva años tejiéndose a su alrededor, y que de vez en cuando desempolvan ciertos columnistas cuando les dice algo que no les gusta, Luisito no responde sino que se dedica a "filosofar" -y provocar- en algunos de sus excelentes artículos cuyos mejores extractos cito a continuación:
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"Para qué dar explicaciones si, como todos los que trabajamos con el ego, yo quiero que la mitad del planeta desee ser como yo y que la otra mitad quiera acostarse conmigo, sin importar en lo absoluto quién esté incluido en cuál mitad.”...

"¿Cómo le vamos a dar una explicación sobre nuestra vida a alguien que se cambiaría por nosotros en un segundo y sin pensarlo? “

"Eso sucede, por supuesto, porque no tenemos vidas que nos gusten ni sexo que nos satisfaga lo suficiente, de allí la necesidad de fantasear con lo que harían los superbellos y megaperversos. Sin embargo, lo grave no es esta especulación de los “pequeños” sobre las andanzas de los “grandes” (después de todo, es natural que la mayoría necesite entretenimiento para evadir sus miserias cotidianas), lo peor, me parece, es la necesidad de algunos de estos bendecidos con belleza y fortuna de explicarse ante el mundo.”

“De haber sabido que (Boris Izaguirre) estaba allí...hubiera botado alguna plumita o hasta hubiera podido adoptar la pose "jarra" de Maritza Sayalero...Pero estuve tan serio, creo, ese bendito complejo de tener que demostrar que uno es serio aunque sea medio galán o medio frívolo o, de nuevo, medio marico, ¡que vaina! Le hubiera dado al menos una latica tipo Spears-Maddona, y yo hubiera sido Britney, claro, tan rubio y juvenil, y hasta se hubiera hablado mal de uno (o peor). Eso me habría gustado para cerrar la ceremonia y, desde luego, para vender más libros.”

Jajajajajaja...¡Cómo gozo leyendo esto! Eso se llama tener sentido de la oportunidad, ¿y por qué no?, usar la cabeza. ¿Sería mucho pedir que algunos políticos y faránduleros siguieran estos pasos? Digo, así se ahorrarían una calentera, y al menos nos hicieran reir un poco. Pero no, eso es mucho pedir, estos casos de respuestas ingeniosas son -lamentablemente- escasos.
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Mejor no hagamos tanto ruido y no lo digamos muy en alto, no sea cosa que otros se enteren. Dejemos que en sus torpes intentos de acabarlos Mario Silva se desgañitándose todas las noches diciendo que Poleo es de la CIA y los columnistas de prensa hagan fiesta con la vida sexual de Luis Fernández. Mejor gritemos todos: RAFAEL POLEO ES DE LA CIA Y LUIS FERNÁNDEZ ES GAY...ya sabemos quienes se benefician, y quienes no.

PDTA: El miércoles les cuento de que van los Papeles perdidos de Luz Clarita que comienzan este viernes